El bochorno de la unidad

Después de unas largas vacaciones que sirvieron indiscutiblemente de análisis del acontecer político son muchas las interrogantes que surge la mente de los venezolanos como la siguiente:¿Qué pretende la mal llamada Mesa de la Unidad para las próximas elecciones de la Asamblea Nacional? Es increíble el bochornoso y aborrecible comportamiento de algunos dirigentes de la oposición. Critican al autócrata-dictador y ellos se comportan igual. Pareciera que cada una de sus actuaciones llevan una sola intención y esta es la abstención. Ellos saben que el venezolano común ya está harto de tanta diatriba politiquera y de sus desaciertos que sólo han llevado al país a lo que observamos diariamente.

El show de la oposición comenzó en todos los estados desde hace algún tiempo con dos propuestas fundamentales: primarias o consenso. Dimes y diretes van y vienen, unos a favor y otros en contra de cada una de ellas, los acuerdos llegan y otros se diluyen hasta con golpes. Ya no les importa que los medios de comunicación reseñen sus diferencias, ni que la más alta ranciedad del chavismo se burle de ellos. Mucho menos lo que piense el pueblo, que ve burlada sus esperanzas de un cambio en Venezuela.

Todos quieren llegar a la Asamblea Nacional, desean un curul cueste lo que cueste, inclusive con el riesgo que trae perder un porcentaje favorablede diputados por sus desaciertos y su repulsivo yoismo. Estas joyas opositoras que vemos y escuchamos diariamente ¿son lo que realmente necesita el país como dirigentes?

Muchos jóvenes se han inscrito en el Registro Electoral Permanente, tienen ganas de participar en los próximos comicios, sin temor a equivocarme creo que también hay un porcentaje aún minoritario de ni-ni que ya comenzó asumir su responsabilidad como ciudadanos, ojalá no se desanimen nuevamente con tanta panfletería egocéntrica de los máximos “líderes de la oposición”.

No pretendo con estas líneas echarle más leña al fuego todo lo contrario, es un humilde llamado a la conciencia y a la responsabilidad que cada uno de los habitantes tiene con esta noble tierra. No importa el color del partido, tampoco quién es más mediático. La próxima Asamblea Nacional debe estar integrada por hombres y mujeres que estén comprometidos con el país, que tengan un montón de ganas de darle un parao a los desafueros que se cometen en el hemiciclo actualmente.

Si continúan las diferencias la abstención no sólo será en las primarias sino también en las elecciones de septiembre. Sería injusto otro fracaso más, ya que el Teniente-Coronel arreciaría con más poder contra la libertad y Venezuela se hundiría rotundamente en el Chávez-comunismo.

Los líderes que asuman la responsabilidad que les corresponde en estos momentos cruciales, si no lo hacen podremos afirmar que son absolutamente cómplices de lo que sucede hoy en Venezuela